martes, 15 de noviembre de 2022

TARTA RED VELVET

 


¡Hola a todxs!

Cuanto tiempo llevaba sin dejar una receta escrita por aquí, A veces las prisas que llevamos nos dejan anclados a la inmediatez de instagram, pero esta receta es tan completa que merece la pena que quede bien explicada.

Hoy os enseño una tarta que tardé en probar pero que me conquistó al instante. Con un bizcocho húmedo y delicadamente sabroso, y una crema de queso suave y avainillada, la tarta RED VELVET pone el broche a cualquier celebración.

La receta original la he tomado prestada del blog mykaramelly y me parece tan fantástica que os la cuento tal cual.


Para elaborar esta delicia preparamos por un lado el bizcocho y por otro lado el frosting de queso. Si lo quieres montar como una tarta con alturas, puedes poner la masa en tres moldes de 20cm. En mi caso opté por disponer el bizcocho en cuadraditos, así que puse toda la masa en la bandeja del horno (35x24cm aprox.) y lo corté en cuadraditos que monté en dos capas, con relleno de crema de queso entre el bizcocho y sobre él.

¡Vamos a ello!

EL BIZCOCHO

90 ml de aceite de oliva suave
275 de azúcar
3 huevos M
290 gr de harina de repostería

20 gr de 
cacao puro sin azúcar
Una pizca de sal
1 cucharadita de bicarbonato de soda

2 cucharaditas de vinagre blanco de manzana
Una cucharadita de c
olorante rojo
Una cucharadita de extracto de vainilla

Para el buttermilk (leche agría que añadimos a los ingredientes del bizcocho)

260 ml de leche entera
2 cucharaditas de zumo de limón o de vinagre


LA CREMA DE QUESO

400 gr de queso crema
250 gr de mantequilla
250 gr de azúcar glass
½ cucharadita de extracto  de vainilla


- Precalienta el horno a 180 grados calor arriba y abajo sin ventilador.

- Mezcla la leche con el zumo de limón o vinagre y reserva (nuestro buttermilk casero)

- Tamiza la harina junto a la sal y el cacao y reserva.

- Bate bien el aceite junto con el azúcar y agrega los huevos uno a uno hasta que la mezcla sea esponjosa y uniforme.

- Agrega el extracto de vainilla y mezcla.

- Añade el colorante rojo a la mezcla de leche con limón o buttermilk. Tendrás una idea cómo quedará el color de tu bizcocho. Puedes intensificarlo con un poco más de colorante o añadir menos cacao en la preparación para que predomine el rojo. Si quieres un buen tono rojo, opta por un colorante de calidad. A mi se me quedó un poco flojo de color...

- Añadimos la mezcla de la harina y cacao poco a poco a la mezcla anterior alternando con el buttermilk, comenzando con la harina y terminando con ella.

- Mezclamos el vinagre y el bicarbonato y lo agregamos a la masa anterior mientras removemos hasta integrar.

 - Reparte la mezcla en la bandeja cubierta de papel o de espray desmoldante.

 - Lleva al horno 12-15 min (ojo, sólo si lo pones en una bandeja y la masa tiene poca altura, si no, el tiempo de horneado será mayor).  Deja enfriar aproximadamente 15 minutos sobre una rejillla y desmolda envolviendo en film.

- Llevamos en caliente a la nevera para atrapar la humedad.

Corta en cuadrados y rellena con el frosting de queso (Bate la mantequilla ablandada junto con el azúcar glas, hasta que blanquee y esté cremosa. Añade la vainilla y a continuación el queso bien FRIO de la nevera para que no se licue. Mezcla suavemente a máquina o a mano, reserva y decora  como más te guste.



Te animo a prepararla para esa fecha especial en la que quieres acertar, y sobre todo deseo y espero que te guste.

¡Hasta pronto!

Maritxu

sábado, 13 de febrero de 2021

MERENGUE VEGANO

 ¿Hola que tal?

En los últimos tiempos estoy descubriendo otras maneras de cocinar sin productos de origen animal, y debo reconocer que me sorprende que algunas elaboraciones puedan resolverse prácticamente igual con productos o alimentos sustitutivos que nos son  relativamente comunes.

Por ejemplo, me he planteado hacer un merengue, pero....el merengue consiste en batir claras de huevo con azúcar.. con lo cual necesitamos sustituir ese huevo..

Pues bien, en 2014, el chef francés Joël Roessel, descubrió que el "aquafaba" o el agua de las conservas de leguminosas conseguía el mismo efecto que las claras de huevo en la elaboración de merengue. En este agua de cocción hay además de la fracción acuosa, una mezcla de almidones, sólidos vegetales y una pequeña parte de proteínas que se han transferido desde la legumbre al agua durante el proceso de cocción, y eso le confiere al aquafaba las propiedades emulsionantes, espumantes, gelatinizantes y en general espesantes. 

Este efecto podría conseguirse también con el agua de cocción de nuestros garbanzos en casa, pero en este caso sería deseable dejar evaporar parte del agua para que la concentración de las sustancias gelatinizantes sea mayor.

En todo caso, las equivalencias son de unos 30 ml de agua de legumbre por cada clara de huevo, así que para hacer un merengue con 90-100 ml de aquafaba necesitamos:

- agua de un bote de garbanzos (+-100 ml)

- 100 g de azúcar

- 1 pizca de cremor tártaro o en su defecto unas gotas de vinagre blanco o de limón.

El cremor tártaro (bitartrato de potasio (KC4H5O6)) es uno de los componentes de la levadura para hornear o polvos de hornear. Es uno de los subproductos de la fermentación del vino, que se deposita en forma de cristales en el fondo de las barricas. Este subproducto, se recoge y transforma dando como resultado final un polvo blanco, fino insípido e inodoro que en la industria alimentaria se conoce como aditivo E-334

Al igual que el cremor tártaro, el vinagre blanco y el limón son ácidos. Por cada media cucharadita de cremor tártaro en la receta, usa una cucharadita de jugo de limón o vinagre blanco.

Para elaborar un merengue con aqua faba sigue los siguientes pasos:

Vierte el agua de la legumbre en un bol y bate con las varillas a velocidad media hasta que empiece a tomar consistencia. Añade unas gotas del ácido empleado y sigue batiendo hasta que nuestro merengue alcance una consistencia sólida. En este momento incorpora el azúcar y bate bien hasta que todo quede integrado.

Da a los merengues la forma deseada y coloca en una placa de horno. Hornea a 85-100 grados durante algo más de una hora hasta ver que se secan. 

Tómalos como más te gusten: con unos hilos de chocolate, con frutas, con un toque de canela o cacao espolvoreado..

Espero que te haya gustado y que lo disfrutes.

Hasta pronto,


Maritxu

martes, 12 de febrero de 2019

CREMA DE COLIFLOR

A medio camino entre un puré de patata casero y una receta de crema de coliflor de las que ojeo por la red, esta cremita de coliflor resulta tan rica que necesariamente tengo que dejar constancia de como nació para poder reproducirla tantas veces como coliflores pasen por mis manos.



Aunque no es la primera vez que comemos en casa una crema de este estilo, la verdad es que el resultado quedaba simplón...o sabía mucho a coliflor.... o no tenía el día...pero esta vez, el resultado de fusionar recetas consiguió sorprender a mis comensales adultos y emocionar a los pequeños. No se puede pedir más.

Tratádose de una crema, podemos imaginar que ni la elaboración es complicada ni los ingredientes extravagantes, así que con lo que tienes en la despensa y con coliflor claro, ponte manos a la obra.

Que necesito para unas seis raciones:

1 cebolla mediana
400 g de coliflor
2 patatas medianas
Aceite de oliva
50 g de creme fraiche
1 yema de huevo
Sal
Pimienta
Nuez Moscada
Pimentón (opcional)

Como lo hago

1. En una olla o cazuela cubre el fondo con aceite de oliva y dora la cebolla en trozos. No necesitas que sean demasiados pequeños porque se triturará al final.

2. Cuando la cebolla tome color añade la coliflor troceada y la patata, saltea y añade agua hasta cubrir las verduras. Pon sal, cierra la olla y mantén cociendo a fuego bajo durante 5-8 minutos (dependiendo de tu súper olla) una vez suba la válvula.
Si tu opción es la cazuela, mantenla a fuego suave durante 30 minutos o hasta que veas que la patata está cocida.

3. Retira del fuego, añade pimienta, un golpe de nuez moscada, la nata fresca (creme fraiche) y bate. Añade la yema del huevo y sigue batiendo hasta que la textura sea uniforme.

4. Sirve con un toque de aceite de oliva y un toque de pimentón, o con un poquito de trufa rallada o disfrútala tal cual.
Si no tienes nata fresca puedes utilizar nata para cocinar de la que se encuentra envasada, aunque tengo la sensación de que ese punto especial que tiene esta crema es el de la nata fresca...

Y ya está...esto es toda la complicación de esta rica crema..Una vez más, las posibilidades de las verduras son infinitas, y además, es una buena manera de que los pequeños de la casa aprovechen todos los beneficios nutricionales de¡¡este conjunto de flores que forman las ricas coliflores!!

Hasta pronto!!

Maritxu


viernes, 21 de diciembre de 2018

DE TEMPORADA DICIEMBRE




Turrón, mazapanes, bombones y polvorones son los reyes de estos últimos días de mes, pero diciembre también tiene sus protagonistas de temporada, en pleno momento de sabor y de precio. Aunque los meses de otoño y de invierno comparten y repiten frutas y verduras de temporada, es en este momento en el que los cítricos los tenemos más sabrosos, el cardo ya no amarga y las alcachofas están duras y prietas. Aprovecha para incluir en tus menús navideños algún plato de cardo con jamón o con piñones, almendras, nueces...algún aperitivo con aguacate y mango o para comer una cremita depurativa de apio entre días de comilona. Disfruta de las fiestas, de la comida y de los alimentos de temporada.

FELIZ NAVIDAD Y FELIZ CIERRE DE TEMPORADA DE 2018

Maritxu

lunes, 26 de noviembre de 2018

DE TEMPORADA NOVIEMBRE


Es cierto que a pesar de que le ha costado un poco llegar, el otoño ya está bien instalado y algunos días nos recuerdan que el invierno se confunde de estación. Pero como cada mes, en noviembre también tenemos nuestras frutas y verduras de temporada que llenan de colores vivos los días grises y apagados… Me estoy poniendo un poco poética, pero es que nunca me había parado a pensar que en esta estación de cambio de hoja, de los verdes a los amarillos y marrones, las frutas y hortalizas también tienen esos colores rojizos, anaranjados o marrones… Es el momento de disfrutar ya de los ricos y anaranjados caquis, mangos, de naranjas y mandarinas más dulzonas, y de zanahorias estupendas que nos aportan una buena dosis de carotenoides antioxidantes precursores de la vitamina A.

Los pigmentos  rojos los ponen la granada, la remolacha y el rábano. Casualmente los tres pueden combinarse en ensalada, así que aprovecha a incluir antioxidantes de este color.
Plátanos y limones nos dan el toque amarillo; nutritivos y  con buen aporte de sales minerales y de vitaminas son ideales en cualquier época y edad. Si, ya sé que el limón no es tan cómodo de comer, pero prueba a incluirlo como parte de otro zumo o como aliño en la ensalada en sustitución del vinagre.
El color blanco lo representa la coliflor, el puerro, y el nabo. Las verduras de color blanco tienen mucha fibra, potasio, vitamina C y algunas sustancias llamadas fitoquímicos  como la quercetina y la alicina (en el puerro) que son de ayuda en prevención de algunas enfermedades digestivas y cardiacas y que además ayudan a equilibrar los niveles de colesterol  y de presión arterial.
Dando paso al verde, pero con toques blanquecinos, tenemos la endivia y el cardo, ambos de la misma familia, con ciertas sustancias amargas en común, con mucha fibra y con propiedades antiinflamatorias y protectoras para el hígado. El cardo, del que nos comemos las hojas, es rico en cinarina, que estimula la creación de los jugos biliares, facilitándole la vida al hígado en la digestión y previniendo así ciertas dolencias propias de este órgano. Desde luego que no nos podía venir mejor para poner un poco a punto el cuerpo para el próximo mes glotón ¿ no?
Las verduras de temporada son las más adecuadas para el organismo porque cubren las necesidades del organismo en los meses que se encuentran en el mercado, son más baratas porque son de producción local y además, tienen un impacto ambiental menor: esta ha sido precisamente la pequeña y última mejora de la pirámide de los alimentos. Para los que no habéis leído la noticia os dejo el enlace

Nos vemos pronto (diciembre está a la vuelta de la esquina)

Maritxu

lunes, 12 de noviembre de 2018

¿EXISTE EL PLATO PERFECTO?


Con tanta recomendación diaria de los alimentos que tenemos que comer al día, tanta pirámide de los alimentos, tanta interpretación y tan relajada a veces de las guías para comer saludable y tanta divulgación nutricional, seguro que a veces ya no queda muy claro si tu día y tu tiempo da para tanta cábala…..

Un plato puede incluir todos los grupos de alimentos en proporciones adecuadas


Por eso os quiero hablar de una herramienta que he conocido más a fondo en un curso de nutrición on line que estoy realizando, y que me pareció muy útil para conseguir equilibrar tanto una comida como todo el día: El Plato de Harvard o Plato para Comer Saludable. Este "plato" es en esencia una guía  para conseguir comidas sanas y equilibradas tanto servidas en tu casa como para llevar fuera desarrollados por expertos en nutrición de la Escuela de Salud Pública de Harvad.
¿En qué consiste?:
·         La mitad del plato deben ser hortalizas o verduras (50%). Puedes imaginar un plato combinado con la mitad de verduras o puedes plantearte un primer plato con verduras, menestra, cremas o ensaladas.
·         El 25% serán hidratos de carbono de calidad (granos integrales: trigo, quínoa, avena, cebada, arroz y todo tipo de pastas preparados a partir de los anteriores). La recomendación de que sean integrales es porque la liberación de azúcares en sangre es más lenta y los niveles de glucosa son más estables que si se ingieren de fuentes refinadas.
·         El 25% del plato corresponde a alimentos proteicos: carnes, pescados, legumbres y derivados a base de proteína vegetal como tofu o seitán y  frutos secos son las opciones más saludables, evitando o limitando embutidos muy grasos.
·         Para aliñar recomienda utilizar aceites vegetales, preferentemente de oliva (en estas tierras mediterráneas) o de girasol, soja, cánola (es un planta de la familia de las coles)
·         Te anima a comer mucha fruta
·         Y a primar siempre el agua como bebida. El plato para comer saludable también permite la ingesta de café o té, limitando las bebidas azucaradas y la ingesta de zumos (por la mayor cantidad de azúcar que contienen). Los lácteos se reducen a una o dos raciones diarias
·         Y por supuesto, se debe llevar una vida activa

Para una comida o para todo el día, esta guía nos habla de lo que siempre hemos oído: come mucha fruta y verdura, que no falten los hidratos, deja un hueco a las proteínas y utiliza grasas saludables. Personalmente creo que esta herramienta te permite crear platos únicos ideales para comer o cenar bien en forma de ensaladas o como platos combinados, o menús de primer plato a base de verduras o ensaladas y segundos de pollo y arroz por ejemplo. Recordad que el pan es también un hidrato de carbono que debería tenerse en cuenta también como parte del plato o de menú. Por ejemplo un bocadillo de atún con tomate y lechuga en proporciones adecuadas estaría de acuerdo con esta guía ¿no? 

Menú a base de pasta con verduras, pollo y guarnición vegetal
Ensalada de lechuga con aguacate, maíz, cous cous y atún

Para mi prueba de evaluación del curso preparé mi propio "plato", que además de completo y nutritivo estaba delicioso. Este plato que se muestra en la foto de cabecera es una composición de ensalada de lechuga con granada y manzana, con una mezcla de quínoa con tomate y aguacate al estilo taboulé, una porción de garbanzos cocidos, unos cuantos pistachos y buen aliño de aceite de oliva y limón. Este súper plato es un plato completo y cumple las proporciones de grupos de alimentos recomendados: 200 g de hortalizas, 100 g de legumbre (proteínas), 100 g de hidratos ….En este caso, el plato es apto para una dieta vegana, pero podrías sustituir las proteínas de los garbanzos por huevo, pollo, cerdo, pescado…hay cientos de opciones.  


Prueba a elaborar algunos platos según este modelo, o poco a poco un menú de dos platos…con lo que tienes en la nevera seguro que consigues maravillas, sólo hay que darle a cada grupo de alimentos el protagonismo que se merece. En el enlace  El Plato para Comer Saludable puedes obtener más información


¿Buena herramienta verdad? ¿Tienes ya en mente el próximo plato saludable?

¡Anímate a contármelo!
Hasta pronto!!!

Maritxu


miércoles, 24 de octubre de 2018

De temporada: OCTUBRE

Con mañanas frescas y tardes cálidas, octubre ya nos va avisando que este tiempo es otoñal, que somos vulnerables a los virus y que tenemos que ir haciendo frente a cambios de temperatura, de luz y de alimentos. Aunque al medio día hace calor, ya no apetecen tanto las comidas fresquitas de los meses de atrás, los platos de cuchara son agradecidos por el cuerpo y empezamos a sentir la dichosa moquita que acompaña a la tos...Bienvenidos al otoño.


La recomendación de comer de temporada no es vana: los productos propios de cada estación no sólo son más económicos, cercanos, frescos y favorecen la agricultura de la zona en la que vives, sino que además, nos proporcionan nutrientes muy adecuados para cada época del año. ¿Que frutas tenemos de temporada en octubre? Naranjas, limones, mandarinas empiezan a asomarse al otoño con mayor o menor acidez según las variedades. ¿Que nos ofrecen? líquidos y vitamina C, perfectos para sobrellevar estos primeros catarros. ¿¿Qué tienen en común el kiwi, la granada, el caqui, y la manzana?? ¡¡mucha vitamina C!!. Esta vitamina es una vitamina hidrosoluble, que aunque abunda en muchas verduras se pierde durante la cocción, así que ahora tenemos la oportunidad de llenar nuestro organismo de frutas frescas que nos proporcionan energía de primera mano. Ya sabemos que los zumos no son tan recomendables como las frutas enteras, porque eliminamos fibra y aumentamos la cantidad de azúcar libre así que intentad masticar y disfrutar de la fruta.

Caquis y granadas: plus de carotenos
Uvas negras




















Como hortaliza propia del otoño tenemos la escarola. Esta variedad de lechuga de hojas rizadas formando un cogollo prieto en su interior es especialmente diurética y laxante. Tiene un aporte energético muy bajo, con pocas proteínas, grasas e hidratos de carbono, mucha agua y altas cantidades de vitaminas B1,B2 y C, provitamina A, clorofila y abundantes sales minerales como calcio, magnesio, hierro, zinc y potasio.

Escarola y espinaca en el mercado

Como curiosidad hay que destacar que es la verdura con más ácido fólico  junto a las espinacas, por ello resulta ideal durante el embarazo, la infancia y si se están tomando anticonceptivos.
La ensalada de escarola y granada es un clásico de otoño e invierno

Su sabor es ligeramente amargo, ya que contiene una sustancia llamada intibina, que también está presente en otras hortalizas de este mes como endivias, rábanos y berenjenas, que facilita el buen funcionamiento de la vesícula biliar y el hígado favoreciendo la digestión de las grasas. Esta característica la hace perfecta para acompañar con frutas como la manzana, la pera, el mango o la granada, pimientos rojos asados, con vinagretas con toque de miel o balsámicas que bordarán cualquier comida. A mi me encanta con manzana, aguacate y maíces, o con mango, semillas de calabaza y queso fresco...no me puedo decidir!!! ¿Y tu como la preparas?

Hasta pronto!!

Maritxu

TARTA RED VELVET